Detalles del producto
Porque la vida es cuento y los cuentos son vida. Y también porque la vida es juego y jugar te da la vida.
¿Y por qué no? me digo yo. Y porque sí, te dices tú.
Porque desde dentro hacia afuera y desde fuera hacia dentro, crecer contando y contar jugando es uno de los motores del cambio.
Por muchas experiencias positivas que nos guíen en caminos de cuento.
Por muchos cursos como éste que te iluminen jugando.
Porque aprender en comunidad es siempre más bonito.
Y porque me gustaría que en este curso a través de Tiritilán, podamos aprender nuevos juegos, recordar los antiguos, sentirlos de nuevo y volver a jugarlos. Y porque los cuentos y los juegos son primos hermanos. Y la familia… oh la familia!
¿Te subes a nuestro barco, primo?